🔹 Un discípulo se acercó a Sócrates y le dijo:
“Maestro, quiero contarte algo sobre un amigo tuyo.”
Sócrates, antes de escucharlo, le pidió que pasara su información por tres filtros:
1. Filtro de la Verdad 🏛️
📌 ¿Es cierto lo que vas a contarme?
- ¿Has verificado personalmente que esta información es verdadera?
- ¿O simplemente escuchaste el rumor y no sabes si es cierto?
👉 Si no es cierto, no tiene sentido compartirlo.
2. Filtro de la Bondad 💙
📌 ¿Lo que vas a decir es algo bueno?
- ¿Hablar de esto ayudará a alguien o solo generará daño?
- ¿Refleja un acto de generosidad o simplemente críticas y juicios?
👉 Si no es algo bueno, mejor no decirlo.
3. Filtro de la Utilidad ⚖️
📌 ¿Es útil o necesario compartir esta información?
- ¿Aporta algo valioso o importante a quien lo escucha?
- ¿Mejorará la vida de alguien o solo alimentará el chisme?
👉 Si no es útil, no vale la pena contarlo.
Reflexión sobre los Tres Filtros
Si la información no es verdadera, ni buena, ni útil, entonces ¿para qué compartirla?
Este método nos invita a:
✔ Evitar el chisme y los rumores.
✔ Fomentar conversaciones significativas.
✔ Promover la ética y la responsabilidad en la comunicación.
✔ Cuidar nuestras palabras y su impacto en los demás.
📌 Conclusión: Antes de hablar sobre alguien o compartir información, debemos preguntarnos si pasa los Tres Filtros de Sócrates. Si no es verdad, ni bueno, ni útil, lo mejor es guardar silencio.
✨ “Hablar solo cuando nuestras palabras sean mejores que el silencio.” 💙